sábado, 5 de abril de 2014

25 años después, una mayoría progresista es posible.

Las primeras elecciones al Parlamento Europeo tuvieron lugar en 1979. Los españoles tendríamos que esperar una década para poder participar. Fueron en esas elecciones, las europeas de 1989, donde la voluntad electoral de la ciudadanía europea se tradujo en una mayoría progresista en el Parlamento Europeo.

Esta afirmación no está exenta de matices e interpretaciones dado el variopinto arco idológico parlamenatario. En 1989 la suma de escaños de los grupos socialista, comunista y ecologista rozó el 50 % del total de la cámara, mientras conservadores, liberales y la ultraderecha obtuvieron el 45 %. El resto, eurodiputados no adscritos e independientes. (Ver gráfico) 

25 años más tarde, la izquierda europea está en condiciones de disputarle a la derecha la mayoría en la eurocámara. El efecto inmediato se traduciría en un nuevo Presidente de la Comisión Europea de corte progresista, probablemente el socialista alemán Martin Schulz, actual presidente de la institución parlamentaria europea.  

Aquí podéis ver la configuración del Parlamento según la proyección que acaba de realizar la propia institución en base a sus últimos sondeos electorales. (Ver gráfico)

 http://www.elections2014.eu/resources/library/images/20140403PHT41934/20140403PHT41934_original.jpg?epbox[reference]=20140324STO39616 
A menos de dos meses de la cita electoral de mayo, el grupo de la alianza progresista de socialistas y demócratas junto a los verdes y al grupo confederal de la izquierda unitaria europea obtendrían según estos sondeos 304 escaños.

En cambio las familias de la derecha europea sumarían en conjunto 310. Partido Popular Europeo junto al grupo de la alianza de los liberales y demócratas por Europa y el grupo de los conservadores y reformistas europeos. Un empate técnico que habrá que resolver el próximo 25 de mayo.